Desde Senassur, especialistas en seguros de moto para corredores y mediadores de seguros, queremos explicar en este post el funcionamiento biomecánico del casco de moto.
En el contexto de los accidentes, la biomecánica aplica las leyes de la física y los principios de la ingeniería mecánica para determinar las fuerzas que actúan sobre un cuerpo y los efectos de las fuerzas sobre el cuerpo como resultado de un trauma.
Un especialista en biomecánica debe tener un conocimiento profundo de la física, la mecánica de materiales y de la anatomía del cuerpo humano.
El casco de moto, es el sistema de protección de la cabeza. Su función principal es la de minimizar o evitar las lesiones que pueden ocurrir en la cabeza durante un impacto, reduciendo las mismas en hasta un 30%.
Los diferentes estudios sobre impactos en la cabeza en accidentes de tráfico de motoristas, demuestran que la cabeza es el segmento anatómico que más heridos graves ocasionan.
Uno de los efectos de la biomecánica tras analizar los datos físicos, mecánicos, materiales y traumáticos que afectan al cuerpo humano durante un accidente es, trabajar sobre los diseños de los cascos. Comprendiendo cómo se ocasionan las lesiones se consiguen mitigar y prevenir daños o lesiones, tanto en el cráneo como en el cerebro.
Los resultados de los análisis biomecánicos, han demostrado que, atenuando la aceleración de la cabeza y distribuyendo la fuerza del impacto por la mayor superficie del casco posible, a través de la compresión y el agrietamiento del revestimiento de absorción de energía del casco, se consiguen evitar lesiones superficiales, tales como laceraciones y abrasiones o lesiones de mayor gravedad que afecten directamente al cerebro.
Los principales aspectos funcionales técnicos de un casco de moto han de ser:
- Resistencia a la penetración y la capacidad de absorción de impactos.
- Prevenir la rotación del cerebro.
- La aerodinámica y la fiabilidad.
- Aspectos no funcionales pero que determinan la comodidad, la estética del producto, peso ligero y térmico.
El casco que se utiliza en la Unión Europea deberá llevar la letra «E» (de Europa) y un número correspondiente al país en el que se ha recibido la homologación. En nuestro país se autorizan dos normas europeas, la norma 22-04 y la 22-05.
Esta es la descripción de las pruebas que se realizan para homologación de un casco de moto:
Lineal: El casco es sometido a una prueba de impacto lineal. Se le hace caer sobre un yunque siguiendo una trayectoria vertical y se mide la capacidad de absorción de energía de la calota del casco a diferentes velocidades y con diferentes tipos de yunques (romos, puntiagudos, etc.), para comprobar las posibles lesiones en la cabeza del motorista.
Oblicua: En la prueba oblicua, el casco es sometido a un impacto-fricción por rotación sobre un yunque con superficie rugosa (similar al asfalto). Sería el equivalente a caernos con la moto e impactar y rozar nuestra cabeza contra el asfalto. La prueba mide las posibles lesiones de cuello y cabeza.
Si queréis saber más, os aconsejamos echar un vistazo a este vídeo en el que se muestran las pruebas de homologación de cascos.
MUY INSTRUCTIVO, SENCILLO Y CLARO DE ENTENDER.
Hola Ángel.
Muchas gracias por tu comentario en el blog de Senassur.
Nos alegramos de que el contenido haya sido de tu interés.
Saludos.