Llegado el momento de asegurar una moto, hay factores que aconsejan contratar un seguro a todo riesgo. Sin duda, se trata de la modalidad más completa al incluir las garantías del seguro obligatorio y del seguro a terceros ampliado.
A tenor del Informe Estamos Seguros 2018 de la Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras (Unespa), los motoristas de nuestro país circulan con mayor seguridad si cuentan con las coberturas de defensa jurídica, ocupantes y reclamación de daños. Sin embargo, raramente suelen contratar la de daños propios.
Concretamente, según el citado informe, sólo el 4,38% de usuarios de motocicletas contrata un seguro a todo riesgo, un porcentaje que desciende al 1,96% en el caso de quienes conducen escúteres y que es prácticamente inexistente (0,02%) entre los que se desplazan en ciclomotores. Cifras casi testimoniales que pueden deberse a la falta de oferta de seguros a todo riesgo o al valor del propio vehículo.
¿Cuándo se debe contratar un seguro a todo riesgo?
Coberturas opcionales al margen, el seguro a todo riesgo es la modalidad más completa que puede ofrecer una aseguradora a sus clientes. Se trata de una alternativa muy habitual en la oferta de seguros de coche que, poco a poco, va extendiéndose a los seguros de moto. En el caso de Senassur, pionera en productos a la carta para todo tipo de motoristas, ofrece el seguro a todo riesgo desde que comenzó a operar en el mercado español en 2010.
Por lo que respecta a cuándo debe contratarse un seguro a todo riesgo, obviamente, nadie mejor que los propios usuarios para valorar qué tipo de póliza se ajusta más a sus necesidades. Pero en el caso de la cobertura de daños propios, estas son algunas de las razones que aconsejan contratar un seguro a todo riesgo:
- La primera razón es obvia: cuando la moto sea nueva y, sobre todo, haya supuesto un desembolso económico importante para su propietario, la contratación de un seguro a todo riesgo facilitará que el tomador esté más tranquilo ante la posibilidad de que la moto sea robada o sufra algún tipo de daño. Con el transcurrir del tiempo, las motos, al igual que otros vehículos, pierden valor. Y ante esa depreciación, es posible que el asegurado se plantee si resulta rentable contratar un seguro a todo riesgo.
- Otra razón de peso es que la moto sea utilizada diariamente o casi. Si su uso es muy frecuente, las probabilidades de sufrir un accidente son mayores que si se conduce solamente los fines de semana. Y también de que la moto sufra algún daño propio. En este supuesto, debería considerarse la opción de contratar un seguro a todo riesgo.
- Y no menos importante, el valor sentimental es otro factor que puede animar a un motorista a contratar un seguro a todo riesgo. El hecho de haber pasado muchos buenos momentos con su moto, que la moto haya pertenecido a un familiar o ser querido o que se trate de una moto clásica son motivos suficientes para decantarse por este tipo de póliza. En el caso de las motos clásicas, Senassur cuenta con un nuevo producto para vehículos clásicos que permite contratar un seguro a todo riesgo.
Sin duda, un seguro a todo riesgo es sinónimo de tranquilidad para quien lo contrata, ya que, además de las garantías propias, posee las coberturas incluidas en el seguro obligatorio y en el seguro a terceros ampliado.
¿Qué garantías incluye un seguro de moto a todo riesgo?
En España, todas las motos que circulen por las vías públicas deben estar aseguradas. Así lo establece la Ley sobre responsabilidad civil y seguro en la circulación de vehículos a motor en sus artículos 1 y 2. Por dicho motivo, no es posible conducir una moto sin haber contratado antes un seguro obligatorio, conocido popularmente como seguro a terceros. Actualmente, conducir una moto que carezca de la correspondiente póliza obligatoria supone una multa que oscila entre 601 y 3.005 euros.
Pensando en los motoristas que solamente deseen contratar un seguro a terceros, Senassur ofrece la modalidad básica de seguro obligatorio, que incluye las siguientes garantías:
- Responsabilidad Civil Obligatoria y Voluntaria. Cubre la responsabilidad civil derivada de los daños materiales y corporales causados a terceros por la moto asegurada teniendo en cuenta los límites fijados en las condiciones particulares de la póliza.
- Protección Jurídica. A través de esta garantía, la entidad aseguradora se hace cargo de la protección jurídica del tomador del seguro cuando sea responsable de un accidente de tráfico ocurrido con la moto asegurada. Como hemos visto al inicio del presente post, esta es una de las coberturas más demandadas por los motoristas españoles.
- Reclamación de Daños. Y entre las garantías que más valoran los motoristas de nuestro país también figura la de reclamación de daños. A través de ella, la entidad aseguradora asume las reclamaciones a terceros cuando el tomador del seguro no es responsable de un accidente de circulación ocurrido con la moto asegurada.
Más completo que el seguro obligatorio, en la oferta de Senassur se encuentra el que popularmente se conoce como seguro a terceros ampliado. En esta modalidad, la correduría de seguros filial del grupo francés Filhet-Allard suma las garantías de Robo (con franquicia) e Incendio.
Es una opción sumamente interesante, ya que, en caso de robo, la compañía abona el valor de la moto en el momento del siniestro. Y si bien no es muy frecuente, no hay que olvidar que son muchas las causas que pueden provocar que una moto sea pasto de las llamas.
Por último, la modalidad de seguro a todo riesgo de Senassur incluye todas las garantías descritas (Responsabilidad Civil Obligatoria y Voluntaria, Protección Jurídica, Reclamación de Daños, Robo e Incendio). Y añade la de Daños Propios (con franquicia). Por lo tanto, a diferencia de otras compañías aseguradoras, la correduría de seguros indemniza por el valor de los daños propios en caso de siniestro.
En definitiva, el seguro a todo riesgo es la modalidad más completa de cuantas se comercializan. Y es aconsejable contratarlo si la moto acaba de adquirirse o tiene pocos años, si se utiliza diariamente o con mucha frecuencia y también si tiene un valor sentimental para su propietario. Pero, independientemente de la modalidad contratada, es posible circular más seguro aún con las coberturas opcionales.
Coberturas opcionales: más tranquilos aún
En cualquier caso, que el seguro a todo riesgo sea la modalidad más completa no significa que no existan otras coberturas que faciliten que los motoristas puedan dormir más tranquilos aún. Con el objetivo de facilitar que cada usuario pueda personalizar su póliza en función de sus necesidades, Senassur amplía su oferta de seguros de moto con las siguientes coberturas opcionales:
- Cobertura de Accidentes del Conductor. Contempla un capital asegurado en caso de fallecimiento e invalidez. Y también para la asistencia médico-farmacéutica y hospitalaria. Es muy recomendable contratarla, ya que, en caso de sufrir un accidente de tráfico y ser hospitalizado a causa del mismo, la Seguridad Social no se responsabilizará de cubrir los gastos médicos del motorista accidentado durante su estancia en el hospital.
- Cobertura de Asistencia en Viaje. Necesaria si se realiza un uso intensivo de la moto, escapadas de fin de semana o viajes de largo recorrido.
- Cobertura de Equipamiento. Sumada al seguro de robo e incendio, cubre los accesorios de la moto asegurada. Y añadida al seguro a todo riesgo, también cubre el casco y la indumentaria del motorista.
Seguros de moto de Senassur
Los mediadores interesados en recabar más información y ofrecer los seguros de moto de Senassur gestionados junto a la gran aseguradora europea L’Équité, pueden contactar con la agencia de suscripción a través del formulario de contacto. Asimismo, tienen a su disposición el teléfono de atención al mediador 902 213 030 (de lunes a viernes en horario de 9:00 a 18:30 horas) y la dirección de correo electrónico senassur@senassur.es.
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