En tiempos de crisis, muchas personas se verán obligadas a replantearse su futuro laboral y reinventarse. Repasamos cuáles podrán ser las profesiones tecnológicas más demandadas por el sector asegurador en los próximos meses.
En el artículo El sector asegurador apuesta por el talento joven expusimos cuáles son las profesiones más demandadas por el seguro más allá de la venta directa de pólizas. Y, al respecto, destacamos que uno de los motivos que invitan a trabajar en la industria aseguradora es la oferta de empleo plural. Así, entre otros, el sector necesita nutrirse de los siguientes perfiles profesionales:
- Informáticos. ¿Hoy en día puede concebirse una entidad aseguradora sin esta figura profesional? Desde quienes se dedican a mantener la estructura informática de la organización o solucionar los problemas de los dispositivos hasta los ingenieros que participan en el análisis de datos o el posicionamiento SEO, su papel es esencial.
- Especialistas en nuevas tecnologías. Al igual que en otras industrias, el big data, la inteligencia artificial, el machine learning o el blockchain son muy importantes en el mundo del seguro para tener un conocimiento más profundo del cliente, diseñar seguros a medida o combatir el fraude.
- Expertos en comunicación y redes sociales. Lo que no se comunica, no existe. Por eso es tan importante contar con profesionales que elaboren comunicados de prensa o artículos para el blog corporativo. Y también que difundan contenidos en las redes sociales. Acciones que, llevadas a cabo con acierto, facilitan posicionar y fortalecer la imagen de una entidad aseguradora.
- Profesionales del marketing. Junto a los ingenieros informáticos, los especialistas en nuevas tecnologías y los expertos en comunicación y redes sociales, son un eslabón muy importante de la cadena de actores que forman parte de la estrategia de posicionamiento de una organización.
- Matemáticos y estadísticos. El sector asegurador no es ajeno a las fuentes estadísticas. De ahí que estos dos perfiles también se encuentren entre las profesiones más demandadas por el seguro.
Queda claro, pues, que la tecnología tiene una gran importancia tanto en el proceso de aseguramiento en sí como en las acciones relacionadas con él. Pero, ¿cuáles serán las profesiones más demandadas por el seguro tras el COVID-19? ¿Cómo podrán acceder al sector quienes quieran trabajar en él o se vean obligados a cambiar de profesión?
¿Cuáles son las profesiones tecnológicas más demandadas?
Porque, sin duda, la pandemia del coronavirus marcará un antes y un después en el ámbito laboral. La aparición del COVID-19 ha supuesto la destrucción de miles de empleos y negocios. Y ha dado lugar a un escenario que obligará a muchas personas a replantearse su futuro y reinventarse.
Un futuro que podría pasar por el sector asegurador, caracterizado por ofrecer empleo estable y bien remunerado. Y, como ha quedado expuesto, en el que tienen cabida distintos perfiles profesionales.
Sobre estos últimos, teniendo en cuenta que el componente digital cada vez es mayor, el blog de Senassur ha recabado la opinión de Carlos Cazaña, CEO de Neoland. Según el responsable de esta escuela de formación, estas son las profesiones y perfiles más demandados en estos momentos de crisis:
- Expertos en diseño UX y UI. Estar presentes en el mundo online no es suficiente. Es necesario centrarse en los usuarios. En el caso del diseño UX (user experience o experiencia de usuario), facilita que los usuarios tengan una interacción fluida y satisfactoria con un producto digital. Y el diseño UI (user interface o interfaz de usuario) contribuye a optimizar la parte visual y hacerla atractiva. Para disponer de un buen producto digital, los diseños UX y UI deben ir de la mano.
- Desarrolladores web. Sin duda, se trata de una de las profesiones más demandadas en distintos sectores, entre ellos, el asegurador. Dentro de los desarrolladores web se encuentran tres perfiles: Front-End, especializado en programación y diseño; Back-End, dedicado a la programación de la arquitectura interna de una web o una app; y Full-Stack, con conocimientos de Front-End y Back-End. Los desarrolladores Full-Stack son muy solicitados en las empresas que, como las del sector asegurador, apuestan por la tecnología y la digitalización.
- Científicos de datos. Ya lo hemos comentado anteriormente: el big data o la inteligencia artificial han llegado al mundo del seguro para quedarse. Los usuarios generan una gran cantidad de datos. Y para extraer conclusiones de estos últimos son necesarios los científicos de datos, profesionales muy analíticos y especializados.
- Programadores de aplicaciones. Entre las profesiones más demandadas por el seguro también podrían figurar las relacionadas con la programación de aplicaciones. Actualmente, los usuarios hacen uso de numerosas apps. Y que un negocio –por ejemplo, una correduría de seguros– cuente con aplicaciones propias aporta valor añadido. Es ahí donde entran en juego los programadores, conocedores de los diferentes sistemas operativos existentes en el mercado y encargados de transformar los servicios de una empresa en una app práctica y útil para el cliente.
- Responsables del desarrollo de productos. Hablar de un product manager es hacerlo del responsable de la estrategia, planificación, lanzamiento y seguimiento de un producto. Debe evaluar propuestas, planificar y ejecutar su desarrollo, coordinar a todos los equipos implicados en un proyecto…
- Especialistas en marketing digital. Ya nos hemos referido a ellos en el apartado anterior. Google, las redes sociales o los blogs corporativos son elementos que no pueden dejarse de lado en las estrategias digitales de las empresas. En definitiva, los profesionales especializados en las acciones que una organización realiza en el mundo online para dar a conocer sus productos o servicios seguirán siendo muy demandados tras el COVID-19.
Formación intensiva: ¿qué es un ‘bootcamp’?
Con el objetivo de especializarse en una de las profesiones más demandadas en el mundo del seguro tras el COVID-19, formarse es un requisito indispensable. Si lo que se desea es hacerlo en el menor tiempo posible, una buena opción son los bootcamps.
Para los lectores que no estén familiarizados con ellos, Carlos Cazaña explica que son cursos intensivos de tres meses y 400 horas orientados a personas sin experiencia previa en la especialidad que vayan a estudiar. Y que permiten a los alumnos aplicar de forma inmediata sus conocimientos en el mundo laboral:
“Los ‘bootcamps’ exigen mucha concentración. Lo interesante de este modelo es que cualquier persona, con una formación mínima, puede reinventarse y encontrar trabajo en sectores que no se ven afectados por las crisis económicas. El objetivo es que todos los alumnos, desde una azafata hasta un camarero, salgan preparados para empezar a trabajar con las tecnologías más punteras dentro del sector digital”.
Consejos para buscar empleo en la crisis del COVID-19
Una vez vistas cuáles pueden ser las profesiones más demandadas en el mundo del seguro tras la crisis del COVID-19, tocará formarse y buscar empleo. Para este último fin, Irene García, experta en gestión de personal y selección y Talent Manager en Neoland, recomienda poner en práctica estos consejos:
- Realizar un currículum atractivo, prestando atención tanto al diseño como al contenido.
- Hacer un guion con el currículum. ¿Qué queremos contar y destacar? ¿Qué necesitamos que el entrevistador sepa de nosotros? Llegado el momento de la entrevista, hay que tener claras las ideas y cómo contar nuestra historia.
- Entrenar para las entrevistas. Grabar las entrevistas antes de realizarlas ayudará a controlar la modulación de la voz y el lenguaje no verbal.
- Actualizar los portales de empleo. ¿Nuestro perfil de LinkedIn está a medias? ¿Falta información que resulte de interés para las empresas?
- Aumentar la red de contactos. Poco a poco, es aconsejable incrementar nuestra red de contactos. Entre estos últimos, no deben faltar profesionales con un rol similar al nuestro ni los responsables de Recursos Humanos.
- Investigar el mercado. ¿En qué empresas nos gustaría trabajar? ¿Cuáles nos interesan? ¿Dónde están?
- Incrementar las habilidades. Finalmente, no podemos descuidar la formación continua. ¿Qué tal mejorar nuestro inglés, familiarizarnos con nuevas versiones de programas o participar en un webinar?