*Es un medio de transporte que empieza a utilizarse en España.
*La moto-taxi es más rápida, económica y sostenible.
*Cuenta con un seguro y ofrece equipamiento al pasajero.
*Solo recogen al cliente previa reserva telefónica del servicio.
Aunque para algunos se trate de una opción todavía desconocida y aún no demasiado extendida, desplazarse por la ciudad utilizando la moto como medio de transporte público es una realidad en España desde 2009. La moto-taxi es el complemento ideal al taxi tradicional y la mejor forma para huir de los atascos.
Ahorra tiempo, dinero y cuida el medioambiente, pues emite menos gases contaminantes que un coche. Una alternativa eficaz en urbes con un creciente parque automovilístico y diversos inconvenientes en el sistema de transporte público.
Moto-taxi, ágil y económica
Como medio de transporte, la moto-taxi ofrece las mismas prestaciones que un taxi de cuatro ruedas. Básicamente, realizar desplazamientos en ciudad desde cualquier punto y a cualquier lugar, pero con la seguridad de que llegaremos a tiempo y no pagaremos de más por los molestos y frecuentes retrasos motivados por atascos, obras y otros imprevistos.
Al tratarse de un servicio diferente y complementario al del taxi tradicional, la moto-taxi no se rige por las mismas reglas. No se puede alquilar por la calle ni existen paradas en la vía pública. Solo se recoge al cliente bajo reserva previa por teléfono y con una tarifa acordada de antemano.
Junto a la rapidez, otra ventaja del servicio es que se puede saber el precio de la carrera y la hora de llegada a destino. En la moto-taxi, el importe del recorrido se calcula por kilómetro, que sale a 0,80 céntimos. Por el inicio del viaje se pagan 0,50 céntimos, con un coste mínimo por recorrido de tres euros.
El servicio es especialmente recomendable para trayectos intermedios dentro de la ciudad, siendo esta una de sus principales bazas para el usuario, en su gran mayoría hombres y mujeres de negocios.
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Calefacción y equipamiento
En Europa, la moto-taxi suele ser un vehículo de alta gama y gran cilindrada, que cuenta con airbag, ABS, asientos con calefacción y sistema de navegación GPS. No dispone de la capacidad de un taxi tradicional, pero sí puede albergar una maleta de cabina o bolsa de viaje, ordenador e incluso una mascota.
Incluido en el precio del trayecto, la moto-taxi ofrece al cliente el obligado casco, guantes y chaqueta protectora. También le proporciona un pack de higiene (bajo-guantes y gorro desechable de plástico), impermeables y manta térmica, por si fuera necesario su uso.
Además, dispone de un seguro profesional que cubre la actividad más allá de lo exigido por la ley. Sus pilotos deben someterse a exigentes pruebas que acrediten su idoneidad para prestar el servicio, lo que es una garantía de confianza adicional.
El hecho de poder transportar a un solo viajero, junto con las limitaciones lógicas que supone ir en moto, puede decirse que son los únicos “inconvenientes” de este servicio público alternativo. Sus ventajas, como hemos visto, son en cambio muchas, y muy grandes también sus perspectivas como vehículo de futuro.
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